martes, noviembre 21, 2006

Noviembre


Me encanta noviembre. Aún a pesar de las carreras por aquí y por allá. Empieza con un no, pero está lleno de muchos sí. Para empezar, está saliendo el sol. Con eso bastaría para dibujar más de una sonrisa, pero si lo unimos al hecho de que se viene la Navidad y ya hay rojo y verde por todos lados…

Lamento mucho que haya gente a la que no le guste el bullicioso ajetreo navideño. Lo mejor de todo es que las campañas solidarias ya empezaron. El que menos ya arrancó la recolección de regalos para los niños pobres de Cañete o la venta de adornitos pro-fondos la Navidad en Villa María del Triunfo. Los comerciales por televisión en donde se comparte panetón con el que no tiene nada, la decoración con árboles y listones en cuanta tienda entras y la ilusión de los niños ante los villancicos…

Noviembre es el mes de la espera, del ya mismo llega, del último esfuerzo escolar, del por fin cerraremos balance, del no falta nada para Navidad. Este año se opacó un poco con las elecciones municipales, las cuales nos cogieron cansados luego de la estresante batalla presidencial, pero al fin ya acabó todo y ya casi todo mundo tiene nuevo alcalde. El saldo lamentable es algunos incidentes violentos aislados, pero al menos la gente optó por el equilibrio, por los candidatos independientes y nada de totalitarismos.

Noviembre es un no ha terminado el año, aún hay tiempo para el último esfuerzo, si queremos todavía podemos llegar a la meta. Es momento de plantearse objetivos para el próximo año, de contagiarse del espíritu navideño, de hacer algo por los niños pobres, de tener detalles con los amigos, de empezar a jugar al amigo secreto… es momento de no dejar que sea diciembre el mes del estrés, del querer acabar todo como sea, de comprar cientos de regalos en un día solo por cumplir, de olvidarse del niño Manuelito y atormentar a todo el mundo con tanto tocar el claxon.

viernes, noviembre 17, 2006

Si vienen por Lima…


Si están viajando a Perú y tienen unos días para conocer Lima, les recomiendo que visiten el centro. Pueden hacerlo en la mañana para visitar el museo de arte italiano (unas pinturas valiosas), las catacumbas y el museo de arte. La entrada es muy económica ($2 a lo mucho) y la visita muy agradable. Pueden ir cualquier día de la semana. También tenemos el Museo de la Nación en San Borja (lejos del centro) junto a la nueva biblioteca, la cual tiene documentos desde la época de San Martín.

Pero no dejen de ir al centro. Si me escucha mi papá pondría una media sonrisa irónica, sobre todo porque él no se olvida que de pequeña detestaba ir al centro. No se podían bajar las lunas del auto por miedo a robos y el humo de los carros era tan pesado que me moría de nauseas. Era una tortura.

Hoy vengo todos los días para ir al diario y me parece muy placentero contemplar la ciudad de los reyes. Los edificios, viejos sí, no pierden su encanto y los balcones nos hacen sentir que hemos retrocedido en el tiempo. Además los puntos turísticos tienen un poco más de seguridad que años atrás. Eso sí, por favor, gasten en un taxi de compañía. Taxi seguro, Taxi Real o Taxi Azul (los números están en las guías telefónicas o llamando al 103 de cualquier teléfono público). No se aventuren a tomar ómnibus a menos que vistan un jean viejo, polo desteñido y ganas de vivir una aventura un tanto incómoda. Los delincuentes notan quien es extranjero y pueden ser un poco descorteses, por decirlo suavemente. Además que si no te toca un chofer buena gente te puede decir que si va al centro cuando en realidad solo va a la victoria. Yo, que vivo en esta ciudad tantos años, me he perdido en más de una ocasión. Una vez subí a un carro que según yo iba a Miraflores y terminé recorriendo el Callao y tuve que bajarme en el aeropuerto.

Para la nochecita el centro también es recomendable (en taxi). Es maravilloso ver la iluminación que han hecho al Palacio de Justicia, el Congreso de la República y el Palacio de Gobierno. Además pueden encontrar excelentes restaurantes. Cerca del palacio de gobierno está – si hay poco presupuesto – el pardos Chiken - donde pueden probar el famoso pollo a la brasa ($7 por persona) del que tanto hablo yo siempre.

Luego de visitar el centro, pueden tomarse otro día para Miraflores. Para quienes no vienen desde varios años atrás, esto se ha modernizado mucho. Hay muchos más lugares para salir y divertirse o comer exquisito. Si hay buen presupuesto recomiendo ir a la cebichería La Mar (en la calle La Mar de Miraflores) de uno de los chefs más renombrados de aquí (Gastón Acurio)…. Claro que por persona son más de $20, pero serán $20 muy bien gastados.

Espero haber cubierto el pedido de un blog lector… aunque en realidad necesito muchos más post para seguir recomendando sitios como Barranco y sus anticuchos … por lo pronto pongo links de referencias a dos guías turísticas: travel uno y travel dos.

p.d.
El mejor referente es el diario El Comercio, ahí tienen información completamente creíble y fiable sobre qué espectáculos o sitios se puede visitar.

lunes, noviembre 13, 2006

Discusión Alturada


“Si votas por Castañeda el pasaje costará 2.50 soles porque alquilará los micros a multinacionales. No habrá pasaje a sol, ni la popular china (0.50), ni pasaje universitario”

El citado es un texto que leí pegado en la ventana de una combi mientras me dirigía al periódico.

Es uno de los tantos mensajes que he visto pegados, con distintos temas pero la misma tónica de guerra sucia, en varios taxis del centro.

Hasta donde sé, el caótico tránsito en Lima está ocasionado por el exceso de combis y el único proyecto de Castañeda al respecto es la construcción de un moderno sistema de transporte denominado El Metropolitano, el cual está conformado por buses rápidos de alta capacidad y modernas tecnologías que operarán en unos corredores a lo largo de una troncal y llevaran en 15 minutos a personas de un extremo a otro de Lima, distancias cubiertas por las combis en por lo menos una hora.

Hasta donde me informaron, el pasaje ahí costaría casi lo mismo que en los viejos ómnibus que a diario congestionan el tránsito y no implicaría la eliminación de ninguna unidad ya existente ni el aumento de tarifas en las combis. El tren urbano no obligará a los ciudadanos a subirse a ellos.

No estoy defendiendo toda la gestión del actual alcalde de Lima, ni pretendo decir que está bien haga los debates cuando a él le parece y no cuando lo dice la mayoría de candidatos, solo sé que las caídas en las encuestas del señor Castañeda, actual alcalde de Lima, se deben no tanto a su propuesta en concreto, sino a la propaganda maliciosa y desinformada en su contra.

¿Es tan difícil competir sin hundir con mentiras?

viernes, noviembre 10, 2006

Hombres G



A pedido de mi amiga de tiempos udepinos, la rox, he de contestar el slam. Sí, así se llamaba en el colegio. Eso de preguntar y responder medio en broma, medio en serio, una mar de divertidas preguntitas. Acá el ejercicio es responder con la letra y títulos de las canciones de uno de tus músicos favoritos. Y bueno, como David fue el primero que me dijo te quiero delante de miles de personas, le cedo el honor de que sea él quien responda mis preguntas.

Como este es un blog así seriototote, quiero compartir algo de info de mi grupo favorito. Ellos son una prueba más de empeño y sueños realizados. Los Hombres G eran unos chicos comunes y corrientes, de los que cuando llegan a una fiesta pasan desapercibidos. Un día se juntaron y lanzaron Venezia y les grabaron un disco y se volvieron famosos. Les costó esfuerzo, pero lograron ser conocidos en el mundo entero. Al Perú vinieron a fines de los ochenta. Lamentablemente se separaron luego de su último álbum en 1992.

El vocalista y compositor es David Summers Rodríguez, nació en 1964 y es hijo de un productor de cine español. También toca el bajo y la guitarra. Según la crítica “Las letras de sus canciones son como una pequeña película, con su trama y su desenlace ya que también es un cineasta frustrado como el mismo lo ha dicho en mas de una ocasión”. Por si fuera poco, le encanta el dibujo y colecciona juguetes antiguos. Y aunque no lo crean, se casó con Marta (la del marcapasos).

Mi cantante: Hombres G

-¿Eres hombre o mujer?
Sor cocodrilo (has sido tu, que crees que no te he visto, has sido tu…)

Descríbete:
Indiana Jones y Lawrence de Arabia (soy primera plana en todas las revistas…)

-¿Qué sienten las personas acerca de ti?
- Sueltate el pelo (=P la cola de caballo es más práctica!!!)

-¿Cómo describirías tu anterior relación sentimental?
- Te quieeeeero (te quiero, te quiero, te quiero y no hago otra cosa que pensar en ti…)

-Describe tu actual relación con tu novio/a o pareja:
-Temblando ( y me hace gracia tu manera de contarlo, como el que cuenta que ha pensado, que ha decidido, que seguimos siendo amigos …y yo sigo temblando…)

-¿Dónde quisieras estar ahora?
-Venecia (lo tengo preparado, tengo las maletas, vamos juntos hasta Italia…)

-¿Cómo eres respecto al amor?
-marcapasos (siento un golpe en el pecho…=p es broma)

¿Cómo es tu vida?
Voy a pasarmelo bien (muy bien!)

-¿Qué pedirías si tuvieras un solo deseo?
-La primavera (llega con dificultad pero en las aceras puede sentirse un cierto olor a amor en la ciudad)

-Escribe una cita o frase sabia:
- Hay algo que funciona mal. Y aquí entre tu y yo es posible que haya algo que cambiar. Y no sé porque no somos todos hermanos. Porque queremos aparentar tanta maldad…¿hay alguien todavía que crea en el amor? (yooooo)

-Ahora despídete:
-- Solo un par de palabras

Invito al che, otro compañero udepino, a hacer el meme. Y si se apunta el nauta, orale.

martes, noviembre 07, 2006

Mendigos


Iba a pie por el golf, muy temprano, rumbo a los Delfines. Para los no limeños, eso quiere decir que avanzaba por el seno de la pituquería limeña. A mi paso – rumbo a una conferencia con el ex ministro Ferrero – trotaban las señoras que pueden ir dos veces a la semana al peluquero y los gerentes de algunas compañías transnacionales, todos preocupados por bajar el colesterol. Es la otra Lima, la opuesta a las calles del centro, donde la preocupación de los transeúntes es ver “quien” les da “alguito” para el almuerzo.

Contemplando los lujosos vehículos y los elegantes choferes, pensaba en la eterna existencia de ricos y pobres: siempre habrá quien tenga más o menos. El tema es que quienes tengan menos, sean un “menos” que signifique suficiente para subsistir. El punto es que el sueldo mínimo de los obreros en verdad garantice un mínimo de comodidad: alimento, vivienda y seguro médico.

Pero centrémonos en la conferencia. Luego de superar las barreras de seguridad impuestas ante las fanáticas de los cantantes mexicanos que acaban de arribar a la ciudad (RBD), pudimos escuchar una música conocida. Alfredo Ferrero, gestor del TLC con Norteamérica y uno de los mejores ministros de comercio exterior que hemos tenido, dio el DO mayor y nos recordó unos números impensables veinte años atrás.

Nuestro PBI está llegando a los 6.5 puntos, nuestro déficit fiscal es menor a un punto, en cinco años triplicamos nuestras exportaciones, tenemos más de 1000 millones de exportaciones en productos no tradicionales y no existe más la hiperinflación. Las exportaciones de Paprika pasaron de 5 a 95 millones en cuatro años, y la misma favorable suerte ascendente siguieron los mangos, los espárragos, las uvas y las alcachofas.

“Tenemos que cambiar la imagen del Perú como un mendigo sentado en un banco de oro” sentenció Ferrero. Explicó que los peruanos tenemos que dejar de ser el problema del Perú. Ya no podemos seguir desperdiciando recursos naturales. Esa es la gran verdad que todos conocemos ( y la vengo oyendo desde que tengo uso de razón).

¿POR QUÉ SI TENEMOS TANTAS RIQUEZAS NATURALES TENEMOS TANTA GENTE POBRE? No es por culpa de los que hasta ahora han hecho empresa, como querían hacernos creer los terroristas para justificar su arrebato violento del poder. Acá, el problema es no haber explotado los recursos (o haberlos dejado llevar sin procesar) y no haber puesto un freno a la corrupción.

Si volvenos a triplicar las exportaciones, mantenemos una política económica estable y generamos un nuevo modelo educativo estaremos encaminados a dejar de ser un país pobre, nos recordó el ministro.

Y bueno, luego de oír números y palabras tan bonitas, salimos todos con una sonrisa de oreja a oreja. Pero mientras recorría una vez más las tristes facciones de los vendedores ambulantes del centro de Lima una nube cubrió nuestro rostro. Sí, hemos mejorado. Sí, el camino es vender afuera nuestros productos porque nuestro mercado interno es pequeño. Sí, tenemos que seguir el ejemplo de Chile o Singapur, que hace treinta años eran tan pobres como nosotros. Pero no, el cambio no será de un día a otro, tomará varios años y depende de que la mayoría de peruanos cambiemos de mentalidad.

viernes, noviembre 03, 2006

Construyendo


(no todas las palabras se las lleva el viento)

Su verde e inquieta mirada proponía siempre un desafío. Sus manos nunca se estaban quietas. Ya sea lanzando una bola de papel, jugando a escondidas con algo o haciendo rayas en el borde del cuaderno. Y sus modales de niño rico no le impedían ser un apuesto rebelde. Parecía no interesarle nada.

Sus ojos marrones tras las lunas no eran el problema. Su ensortijada y ordenada cabellera tampoco. Su delgada figura y su aire de judío tampoco. Su intelecto, sus frases elaboradas, su lenguaje de adulto y su adusta seriedad eran el problema. A los quince todos quieren ser populares, pero ser tan hábil con los números y tan propio al comunicarse eran requisito para ser el último en las preferencias femeninas.

No es difícil imaginar que eran rivales a muerte. Lo que uno decía lo deshacía el otro. Y era peor durante los cursos libres, porque por las sinrazones del destino, les tocó juntos el taller de periodismo. Un grupo de cinco alumnos era muy poco para tamaña rivalidad. Las dos niñas ignoraban sus pleitos porque vivían soñando con si las miraba el guapo del grupo, un alumno con pinta de artista y carencia de vocabulario. Entre todos tenían que hacer una revista.

La profesora – en realidad periodista a tiempo completo que dedicaba dos horas a la semana para enfrentar a dichos adolescentes – no sabía mucho de pedagogía ni de psicología adolescente, pero intentaba de miles de formas hacerlos trabajar en equipo, lo cual era casi imposible porque todo el esfuerzo del intelectual era destruido por las críticas del rebelde, quien lo único que hacía en clase era intervenir cuando ya todo estaba listo para decir que todo estaba mal.

Un día, al inicio de clase, la profesora pidió al opositor por excelencia que se sentara al piso e hiciera el mejor castillo de naipes posible. El alumno se rió con sorna y se dispuso a la tarea más feliz que nunca. El resto del grupo lo miró casi con envidia y luego de quejarse por quince minutos, empezaron a trabajar. Al toque de la campana, la profesora pidió al mudo que derrumbara el castillo, hecho que ocurrió en menos de un segundo. Todos reían y el rebelde se paró más molesto que nunca con su “¿porqué?” en la mirada.

“Construir toma mucho tiempo y esfuerzo, pero destruir es fácil y rápido. Espero entiendan que no pueden ir por la vida criticando por criticar, sin ayudar a mejorar, sin considerar el esfuerzo de quien trabajó” – sentenció la profesora.

No sé si el alumno recordará el hecho, pero sería interesante que los políticos peruanos pensaran en eso.