lunes, octubre 09, 2006

Tres perlas de las Américas


Larga falda florida, rizos casi cobrizos, delgado rostro arábigo y mirada inteligente. Su nombre es sinónimo de excelencia. Sus notas tan altas como sea posible tenerlas.

Jeans apretados, coquetos lentes de sol y figura envidiable. Sabe tanto de aeróbicos como de música o de hidratantes capilares. Los chicos que suspiran por ella en las fiestas no se imaginan lo responsable, inteligente y aplicada que es. Que la jalen es un imposible.

Siempre a la moda, siempre contenta. Con ojos muy grandes y sueños irrompibles. Desde pequeña una traviesa. Tan sentimental como la que habla, tan estudiosa como las otras.

Las tres son tan distintas, tan dispersas, que no es fácil juntarlas en una frase. Pero aún cuando una sigue en Piura y las otras se fueron muy lejos, el 12 de octubre las tres celebran lo mismo. No es que el día de la raza sea tan importante para ellas. Ni que el descubrimiento de América merezca un almuerzo especial (y que me disculpe Colón si se siente desplazado). Resulta que por cosas del destino, nacieron el mismo día. Y estudiaron juntas cinco años la misma carrera. Y compartieron tanto dichas como tristezas, renegaron por los mismos trabajos de lengua, suspiraron por los mismos profes españoles, protestaron al unísono por las pruebas con puntos negativos de cine y por supuesto, se graduaron el mismo día.

Son tres perlas de las Américas que conquistó Colón. Tres frutos del mestizaje. Ni incas, ni españolas, ni asiáticas. Simplemente piuranas como el algarrobo, la chica de Jora o el Secochavelo. Una de ellas, luego de batallar en la cruel Lima regresó al pueblo natal para encontrar el amor. Las otras dos se enamoraron de extranjeros y cruzaron el océano con una maleta cargada de ilusiones (según sé, les ha ido muy bien) para difundir a su patria en tierras extrañas.

(P.D. Y como siempre, no faltaba más, con un mensaje las saludo a las tres)

7 comentarios:

ROx dijo...

Ay Marcela, Ay Marcela, Ay Marcela.

Marcela Mendoza R. dijo...

eso significa que te gusto o que no te gusto? digo...

Anónimo dijo...

Aunque yo no sea el destinatario de tus líneas, a mí me gustó.

Me ha tocado mucho en la nostalgia. En mis amigos que han viajado, que ya no veo, que ya no están.

Y me consuela creer que si la cercanía física no es lo mismo que amistad, la lejanía geográfica tampoco debería asociarse al olvido.

Nos vemos en la red.

Marcela Mendoza R. dijo...

lejos pero siempre cerca, nauta, las amigas viajan lejos de la tierra pero no lejos de un saludo virtual.

(lo que pasa es que las destinatarias se quedaron sin palabras por la emoción de las celebraciones)

Ursula dijo...

Qué lindo, saluditos a tus amigas... Tengo la sospecha que conozco a una de ellas, o me equivoco???

Marcela Mendoza R. dijo...

sip. super conoces. pasa a saludarla!!!

Anónimo dijo...

Ay Marce no recuerdo si te escribí sobre este artículo a tu correo personal, pero hoy lo he vuelto a leer y te aseguro que me gustó más que la primera vez. Solo puedo decirte gracias.