martes, abril 07, 2009

Sí, así fue


Allá o acá es lo mismo. El sol siempre se oculta tras embellecer el cielo. La oscuridad nos llena por completo algunas horas y finalmente, al día siguiente, tras otro despliegue de naranjas y lilas, el sol vuelve a salir. Es un ciclo vital, una rutina, una maravillosa oportunidad de detenerse en el tiempo y soñar. Dura apenas unos minutos, pero cada día es diferente y se repite para quienes tienen tiempo de detenerse a mirarlo.

Ayer y hoy es lo mismo. Si algo sube, baja. Viene y va. Asume todo el poder y pasa luego a depender de otros. Juzga y es juzgado. Le pasa a todos, incluso a los ex-presidentes como Fujimori...

¿Se probó que derrocó el terrorismo? Sí, se probó. ¿Se probó que acabó con la inflación? Sí, se probó. ¿Se probó que ahora tenemos estabilidad gracias a ellos? Sí, se probó. ¿Es culpable de violar derechos humanos? La Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia presidida por el juez César San Martín Castro lo halló por unanimidad culpable de las masacres de la universidad La Cantuta y Barrios Altos, y por los secuestros del empresario Samuel Dyer y el periodista Gustavo Gorriti. ¿Se probó su responsabilidad política en las acciones de sus equipos militares y servicios de inteligencia? Sí, se probó. Y lo condenaron por homicidio calificado por 25 años de cárcel.

Fujimori tuvo sus días de gloria, sus violeta naranja. Y nadie puede dejar de decirle gracias por lograr la paz y la estabilidad económica y por habernos brindado un nuevo panorama económico. Pero el fin nunca justifica los medios y ahora llegó su noche, porque la gente que trabajaba para él cometió errores tremendos, atentó en esos casos particulares contra los derechos universales y, según sentencias en estos momentos los jueces, no evitó o impidió que ocurrieran algunas injusticias calificadas como crímenes contra la humanidad. ¿Aprenderán ahora sí a respetar los derechos del pueblo quienes se encuentran en la cúspide del poder? Ojalá.

p.d. En la imagen, atardecer en el río que bordeaba el hotel, muy cerca de Washington.

3 comentarios:

ROx dijo...

Al menos un final feliz, por aqui: el principio de una condena.

Me alegra la sentencia!

ROx

Viv. dijo...

En ocasiones me he preguntado si estos lamentables personajes que ha padecido toda Latinoamérica son en el fondo tan ingenuos que creen perpetuar su impunidad en el tiempo más allá de su mandato. ¿O será que subestiman sobremanera a sus gobernados?
La combinación de colores del atardecer es espectacular; el ocaso de un dictador no ha de ser colorido.
Saludos.

Marcela Mendoza R. dijo...

y bueno blue, si, seria una llena de nubes negras y tormentas!!!

ojala se haga escuela rox, ojala!